Aww...

«Mi mujer se enfermó. Todo el tiempo estaba nerviosa por sus problemas en el trabajo, su vida personal y nuestros hijos. Perdió cerca de trece kilos y a los 35 años llegó a pesar poco más de 40 kilos. Estaba demasiado delgada y gritaba constantemente. No era una mujer feliz. Sufría constantes dolores de cabeza, en el pecho y tensión muscular en la espalda. Tampoco dormía bien, solo lo hacía a la madrugada y por eso se mostraba cansada el resto del día. Nuestra relación sin duda estaba al borde del colapso. Poco a poco dejó de cuidarse a sí misma, andaba con ojeras y siempre despeinada. Por un tiempo, se negó a trabajar en cine. Fue perdiendo la esperanza y ahí pensé que pronto nos divorciaríamos. Así que me decidí a poner manos a la obra. Después de todo, ella es la mujer más bella del mundo. Es perfecta para la mitad de los hombres del planeta y yo soy el único que tiene el privilegio de dormir a su lado y abrazarla. Empecé a mimarla con flores, besos y elogios. Al principio se sorprendió, así que seguí intentando complacerla en todo momento. La llené de regalos y vivía solo para ella. Le dije piropos a solas y frente a todos nuestros amigos. Ella empezó a revivir, a florecer. Se puso aún mejor que antes. Ganó algunos kilos, dejó de estar tan nerviosa y me ama más que al principio. Yo no sabía que ella podía amar con tanta intensidad. Y entonces me di cuenta: la mujer es el reflejo de su hombre.»

- Brad Pitt

Hotline Bling

Ésta vaina compone el ánimo... y qué.

Elizabeth W. G.

La ambición y la codicia...

Passion

* Uppermost - Passion (Ash/Black Veil)